¿Por qué se calienta el móvil al jugar? Causas y soluciones que funcionan

¿Tu móvil se calienta de sobremanera mientras estás jugando? Te contamos a qué se debe y cómo solucionarlo.

Cuando jugamos en el móvil, es bastante común que este comience a elevar su temperatura. Esto es algo que se acentúa durante los meses de verano, en los que el calor del ambiente se transfiere a nuestro dispositivo. Pero, ¿hasta qué punto esto es normal?

Para entender hasta qué punto el calentamiento del móvil es algo preocupante y cuándo deberías tomar medidas, hemos preparado está guía, en la que abordaremos todo lo relacionado al incremento de temperatura del smartphone. Además te contaremos qué factores lo ocasionan y qué puedes hacer para evitarlo. ¡Si sigues nuestros consejos, tu batería te lo agradecerá!.

¿Por qué mi móvil se calienta?

Por supuesto, para abordar este tema como es debido es necesario conocer cuáles son las causas que provocan este aumento de temperatura. ¿Por qué ocurre?

Básicamente, debes saber que independientemente de sus prestaciones, los móviles están constantemente procesando información en segundo plano, algo que hace que el chip se caliente. Hasta aquí, decir que se trata de algo completamente normal: el procesador trabaja y genera calor con ello.

El problema viene cuando ejecutamos alguna app o juego que exige un gran procesado. Entonces uno puede empezar a notar un incremento en la temperatura por encima de lo saludable.

Jugar en el móvil es una de las razones que llevan al sobrecalentamiento del mismo.
Jugar en el móvil durante mucho tiempo puede incrementar la temperatura del dispositivo

Esto suele ser más frecuente con aplicaciones de edición de imágenes y de vídeo, así como también en ciertos juegos, especialmente los que son más complejos y tienen mejores texturas. Un ejemplo de esto es Genshin Impact, considerado como uno de los mejores juegos RPG para smartphones, el cual requiere de una elevada cantidad de recursos de procesado.

Más allá de los requerimientos de cada app o juego, hay que señalar que también existen condicionantes externos por las que se incrementa la temperatura del móvil.

Si, por ejemplo, estás jugando en tu móvil y este tiene puesta su funda, entonces el calor que genere el dispositivo se conservará dentro de este, elevando así su temperatura. Del mismo modo ocurre si lo utilizas en un lugar donde la temperatura es alta. No es lo mismo jugar en una habitación con aire acondicionado que hacerlo a pleno sol.

En resumen, cuando usas aplicaciones o juegos demasiado exigentes en tu dispositivo y al mismo tiempo no te aseguras de que haya una fuente de refrigeración o de disipación del calor, la temperatura aumentará más rápidamente.

Un detalle a tener en cuenta es que los fabricantes han desarrollado diversos móviles diseñados específicamente para jugar mucho, los cuales integran sistemas de refrigeración avanzados, como cámaras de enfriamiento o refrigeración líquida. De la misma manera, existen pequeños accesorios como mini-ventiladores destinados a disipar el calor de nuestros smartphones.

¿Qué puede ocurrir a mi móvil si dejo que se caliente mucho?

Esta es una pregunta importante y va más allá de las simples molestias en las manos al sujetar el dispositivo.

Es un error muy grave dejar que el móvil se caliente y no hacer nada para que disminuya la temperatura de este, ya que la batería del dispositivo se resiente y puede dañarse con una mayor facilidad.

Muchas personas se preocupan de cargar su móvil de forma correcta para cuidar su batería, pero sin embargo no tienen en cuenta que el incremento de temperatura es, en muchos casos, la principal razón de que esta se dañe.

A esto hay que sumarle el hecho de que los procesadores están diseñados de manera que cuando el equipo incrementa la temperatura de forma exagerada, este limita su rendimiento para intentar enfriarse. Es por esto que los jugadores notan que sus juegos comienzan a ir cada vez más lentos a medida que el smartphone se calienta.

Decir que esto no significa que el móvil esté roto o vaya a romperse, simplemente que el procesador reduce su capacidad de forma temporal debido al exceso de calor. Aún así, hay que ir con cuidado, ya que un recalentamiento constante provocará daños irreparables en la batería, haciendo que esta dure menos y se caliente cada vez más.

¿Qué hacer cuando se calienta el móvil?

Si notas que tu móvil se está sobrecalentando, debes pausar tu juego y hacer lo siguiente.

  • Apaga la pantalla del móvil y, si tiene la funda puesta, quitásela.
  • Luego debes buscar un aparato que emita corriente de aire, como un ventilador casero o un aire acondicionado, y colocar el móvil frente a este.
  • Tienes que dejar reposar el móvil sin usarlo durante unos minutos.
  • Si notas que su temperatura es exageradamente alta, prueba a apagar el terminal y repetir los pasos anteriores.
  • No introduzcas tu móvil en la nevera, ya que esto podría afectar a la batería de manera negativa.

Siguiendo estos pasos al pie de la letra, podrás hacer que tú móvil recupere su temperatura normal rápidamente. Recuerda que es importante que este no se sobrecaliente constantemente ni que alcance temperaturas muy elevadas durante largos periodos de tiempo, ya que esto solo ocasionará un estrangulamiento térmico en el que los componentes internos se quemarán.

¿Qué hacer para que el móvil no se caliente tanto?

Es aconsejable evitar exponer el móvil a la luz del sol directamente mientras juegas para evitar problemas de sobrecalentamiento

Si estás decidido a jugar en tu móvil, es importante que sepas qué hacer para que este no se caliente hasta el punto de afectar su vida útil.

En primer lugar, no debes jugar con el móvil enchufado a la corriente. De por sí, cuando el dispositivo se está cargando, suele incrementar un poco su temperatura, lo cual es normal. Pero si a esto le sumas la exigencia de procesamiento gráfico para ejecutar juegos, entonces tienes entre tus manos la receta para un sobrecalentamiento.

También debes evitar jugar con la funda del móvil puesta, sobre todo si vas a hacerlo durante largos periodos de tiempo. De esta forma podrás asegurarte de que el calor no se conservará en el equipo, sino que tendrá una vía para salir de este.

Si todo lo demás falla, entonces puedes jugar mientras utilizas alguna fuente de refrigeración externa. Algunos fabricantes disponen de fancoolers portátiles, los cuales se instalan en el dispositivo para ayudar a disipar el calor. Si no tienes acceso a estos, siempre puedes acercarlo a un ventilador o aire acondicionado.

Por último, una opción más radical para evitar que tu móvil se sobrecaliente mientras juegas, podría ser optar por trasladar tus juegos de smartphone al ordenador con Google Play Juegos para PC.

Móviles que no se calientan: qué móviles elegir para jugar

Si eres un usuario que disfruta la comodidad de jugar desde el móvil o que está pensando en comenzar a hacerlo, es necesario que sepas qué tipo de equipos son menos propensos a sobrecalentarse. Simplemente, a la hora de elegir un móvil, debes fijarte en ciertas características que te asegurarán que su procesador aguantará, como por ejemplo el tipo de chipset (intenta que sea de una generación reciente), la memoria RAM o incluso el diseño.

Redmi Note 10 Pro: un panel de gran calidad con un procesador potente.
Redmi Note 10 Pro: pantalla AMOLED, gran batería y un procesador muy capaz a un precio económico.

En primer lugar, debes fijarte en el procesador que incorpore el dispositivo, ya que de esto dependerá su potencia. Una buena y económica opción puede ser el Snapdragon 732G de Qualcomm, el cual llevan en su interior móviles como el Redmi Note 10 Pro de Xiaomi o el Poco X3 NFC. Este procesador es lo suficientemente potente como para ejecutar la gran mayoría de títulos en una calidad gráfica más que decente.

Por otro lado, si puedes permitirte pagar un poco más de dinero, entonces el Qualcomm Snapdragon 778 que tiene el Realme GT Master, es una muy buena elección, al igual que el Poco X3 Pro con su Snapdragon 860.

También hay alternativas del fabricante chino MediaTek, como el Dimensity 1200-AI que lleva el OnePlus Nord 2, la serie Dimensity 800 o incluso una opción un poco más antigua, pero que sigue siendo muy decente para «correr» de forma fluida muchos juegos no tan demandantes: el Helio G90T que incorpora el Redmi Note 8 Pro, entre otros.

Evidentemente, si el dinero no es problema para ti, puedes optar por modelos de gama alta, tales como el Snapdragon 870 que incorporan el Oppo Reno 6 Pro, el Motorola Edge 20 Pro o el Poco F3, entre otros. O bien ir más allá con algún modelo premium que incluya el reciente Snapdragon 888 de Qualcomm.

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Además del procesador, debes fijarte en que el dispositivo que elijas tenga suficiente memoria RAM para ejecutar todo de forma fluida sin cerrar procesos tan agresivamente. Actualmente se recomienda optar por versiones de 6 u 8 GB de RAM, ya que entre lo que necesita el sistema para funcionar y las exigencias de los usuarios, una cantidad menor puede ser insuficiente y traer problemas a largo plazo.

Por último, si solo te interesa jugar y nada más, entonces puedes optar por móviles gaming, los cuales han sido diseñados específicamente para jugar. Estos también suelen incluir el procesador más potente del mercado y sistemas de refrigeración para evitar el sobrecalentamiento, aunque sacrifican otros apartados, como la cámara.

En ese sentido, si te interesan los móviles gaming, algunas de las mejores y más recientes opciones son: Asus ROG Phone 5, el Lenovo Legion Phone Duel y el Black Shark 3. Todos esos se caracterizan por contar con la optimización y potencia necesaria para que los jugadores disfruten de sus títulos favoritos en el móvil sin temor de que este se sobrecaliente tras largas sesiones de juego. Ademá, sus baterías son muy generosas, pudiendo incluso llegar al final del día de uso intensivo.